Agrandar imagen
"Nada es imposible en una final", según el hooker de los Jaguares, Agustín Creevy. Algunas cifras muestran la dificultad de la tarea para los argentinos ante un rival de jerarquía que en sus filas cuentan con varios All Blacks.

Los "Crusaders", poseedores del récord de títulos (9), solo perdieron dos de sus 16 partidos de la temporada regular, concluida en primera posición (entre todas las conferencias) y con el mejor ataque (81 tries).

Ese 2016 llegaron los Jaguares al Super Rugby, con el objetivo de mejorar la competitividad de la selección argentina, de la que son el esqueleto. Y si los resultados de los Pumas en el Mundial de Japón (20 de septiembre-2 de noviembre) van en consonancia con los obtenidos por los Jaguares este año, entonces Francia e Inglaterra, sus rivales de grupo en el torneo, deberán preocuparse.

¿Hasta dónde escribir la historia? "Intentamos mantener al equipo lejos de esta agitación. Es fantástico, genial, pero pienso que debemos abstraernos y concentrarnos en intentar continuar progresando con mucha humildad", afirma el técnico Gonzalo Quesada.

Jaguares pone lo mejor

La franquicia tendrá tres cambios en su formación inicial, con respecto al equipo que venció a Brumbies de Australia en semifinales, para jugar el próximo sábado la final del Súper Rugby ante Crusaders de Nueva Zelanda.

El entrenador Gonzalo Quesada determino que en el pack de forwards ingresarán Marcos Kremer por Tomás Lezana en la tercera línea y Nahuel Tetaz Chaparro por Maycos Vivas en la primera.

Entre los backs la variante será la entrada de Ramiro Moyano por Sebastián Cancellierie, señaló el sitio oficial de la Unión Argentina de Rugby (UAR).