En diálogo con Diario Río Uruguay, el guía de pesca Mariano Bradanini explicó que esta es una problemática que “se viene trabajando hace muchísimos años, hace más de una década y media”, con el objetivo de que “haya un cuidado de recursos importante, porque estamos convencidos de que el dorado ha sido el causal de mejoras laborales en todo sentido". Por todo ello, "que hoy se esté trabajando en el poder legislativo con una norma, le da una impronta distinta”.
Igualmente, reconoció que “estamos minimamente esperanzados, porque hemos pasado por estos puntos en los cuales se comienza a trabajar raudamente y luego se va enfriando, para terminar siendo más de lo mismo", por lo que en lo que respecta a los guías, "no perdemos la esperanza que esta vez haya una definición importante”.
Controles
De esta manera, apuntó que “pueden haber múltiples leyes, pero si aquellos estamentos que tienen el poder de controlar no lo hacen insitu, cualquier ley es compleja”. En el caso de Concordia, aseguró que “es muy difícil que se hagan controles en el agua”, por lo que “sería importante que contemple tener un puesto fijo en el agua y no tener que hacer controles en la tierra cuando los peces ya están muertos y sin la posibilidad de devolverlos”.Entre otras cosas, destacó que “lo sustancial de esta iniciativa es que se suspenda la pesca comercial, se prevé que sea en su totalidad, pero por ahí hay que trabajar un poquito más y tratar de que los pescadores artesanales tampoco tengan las manos atadas a la hora de hacerlo, sino que lo hagan en los lugares adecuados”, ya que “muchas veces uno habla de pescadores comerciales/artesanales, pero lo que complica de verdad a Concordia es la pesca furtiva y la pesca con redes dentro de la zona de seguridad de la represa donde hay dorados muy grandes”.
No obstante, remarcó que “el eje en sí, es trabajar para la disminución parcial o total de la pesca del dorado y que sea declarado solamente como pesca deportiva estrictamente con devolución, algo que apoyamos firmemente y que de manera personal practico desde hace años”.
La especie
En la región, Bradanini mencionó que “hay una veda para el dorado, muchas veces variable, pero ene ste momento sería como la ley porque, por ejemplo, no está permitida la posibilidad de pesca de ninguna especie embarcado en la zona que contemple CARU”.En el caso del dorado, precisó además que “es un pez migratorio que en determinadas situaciones del río, climatológicas y de estaciones, tiene un arribo más grande a Concordia” y “muchas veces depende de cómo está el río, si el agua se mueve, si hace calor, si hace frío”. Estas condiciones provocan que “en algunos días se pesque muchísimo y que en algunos días no se pesque nada”.
Por otro lado, alertó que “podemos confirmar que el tamaño -de los peces- ha disminuido muchísimo y lo que llega es aquel pescado que está arribando, que llega a Concordia como un lugar de crecimiento y se encuentra con una barrera en el medio del río, que es la represa, por lo que no se puede retirar”. Otro es el caso de “aquellos pocos que bajan de la represa y tienen un crecimiento ‘normal’, como también el de aquellos que logarn adaptarse a la cercanía de la represa y tienen una situación alimentaria mejor, por lo que tienen un crecimiento desmedido, pero esos son los mínimos”.