En contacto con Diario Río Uruguay, el funcionario municipal resaltó que "es una posibilidad de generar fuentes de trabajo genuina, ellos van a poder vender sus productos directamente a la sociedad". En esta oportunidad, "la cooperativa se llama COOPAR.". "Las edades de sus integrantes varían entre el más joven - de 25 años - y el mayor que tiene 52", comentó. Subrayando que "son todas historias muy duras y el trabajo es particular porque se dará en un contexto de encierro".
Puntapié
Velasco valoró que "recién dimos el puntapié inicial, con la documentación pertinente", por lo que "aún no está funcionando y se espera la aprobación del trámite, que puede llegar a demorar mucho"."Este es un caso atípico: hay muy pocas cooperativas en nuestro país que estén conformadas por internos de las unidades penales", remató. Subrayando que "en esta oportunidad, son todos presos; por lo que es una rareza y un orgullo".