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La coordinadora departamental de los comedores provinciales, Silvina Murua, explicó que “cuando asumimos en enero, lo primero que nos pusimos a hacer es ver cómo estaban las rendiciones, las facturas”, a través de lo que notaron que “algo no estaban funcionando bien”, por lo que “empezamos a hacer una investigación más exhausta y pudimos recopilar pruebas sobre distintos malos manejos de la administración de la tarjeta Sidecreer, donde se depositan los distintos montos para hacer uso dentro de los comedores escolares”.

De esta manera, junto "nos presentamos en la fiscalía y desde ahí empezamos esta lucha dentro de los comedores”.

En cuanto a las pruebas, precisó que “nos encontramos con pedidos de dinero en efectivo, el sobrante de la plata destinada a los comedores, ya que les llegaban 10 millones de pesos a una tarjeta, utilizaban 7 millones y al resto se lo pedían al proveedor en efectivo para pagar una cuota, viajar o comprarse ropa, cosas que cuando las leía no las podía creer, porque no le están robando al estado, le están robando a los niños”. remarcó.

Al respecto, Murua destacó que los involucrados en este manejo de recursos “ya están imputados y declararon” e incluso “me llamaron directamente a mí por teléfono para que les de explicaciones sobre la denuncia, cuando las pruebas que teníamos eran contundentes", tras lo cual afirmó que "no tienen escrúpulos”.
Proveedores
Consultada sobre el papel que cumplen los proveedores en la distribución de los recursos, Murua aseguró que “lo primero que hice fue reunirme con los (proveedores) que tenían facturas más grandes y uno de ellos me dijo que perdió muchas escuelas, porque le pedían cosas y lo ponían ‘entre la espada y la pared’, ya que, si quería trabajar, tenía que acceder o lo sacaban”. Mientras que otros proveedores "me dijeron que a ellos no les pidieron nada, pero eso lo determinará la justicia más adelante”.
Investigación
Por lo pronto, la funcionaria mencionó que “el fiscal siempre está en contacto con nosotros” respecto a la investigación e indicó que “ahora ellos -los imputados- se declararon inocentes, pero nosotros tenemos pruebas contundentes como para seguir con esto adelante, por lo que estamos esperando al juicio”.

No obstante, aclaró que “seguimos investigando y no creemos que sea únicamente con un proveedor” este tipo de situación, motivo por el que “tenemos 16 supervisores que están día a día en las escuelas y nos estamos encontrando con otras pruebas como con los que roban con guante blanco, que dibujan muy bien, pero nosotros sabemos que ahí no están las cosas claras”.

Al respecto, aseguró que “por más que a veces ‘se sientan perseguidos’ como dicen ellos, yo les digo que sigan, que tenemos un respaldo y no tomamos decisiones solos. Con la denuncia de hoy son 10 comedores y tenemos otras para seguir ampliando, pero no queremos hacer tantas para que se puedan concretar algunas”, dado que “después tenemos otros comedores involucrados que roban con guante blanco, que conocemos y los estamos controlando”.

En diálogo con el programa Una mañana por delante de Radio Ciudadana, Murua subrayó que en el marco de esta intervención, “mejoró muchísimo el menú de los nenes, que ya no es el mismo”, teniendo en cuenta que “robaban porque les daban guiso todos los días no les daban carne; recortaban no dándoles el postre, la merienda, guiso y salsa todos los días”, por lo que “una de las cosas que nosotros hicimos es que los nenes tengan un menú variado con carne tres veces a la semana por prescripción de los nutricionistas, con merienda, yogurt y cereales”.

Dicho esto, remarcó que “no importa quien sea, si son directores o supervisores, si roban dentro de lo que respecta a mi función, no nos temblará la mano para hacer la denuncia que tengamos que hacer”, concluyó.