
Se supo mediante registros fílmicos, que una sola persona habría actuado en este hecho, dirigiéndose directamente hacia el dinero depositado por los fieles y a los diversos objetos de valor simbólico que suelen ser dejados en agradecimiento a San Expedito.
Cabe recordar que la ermita de San Expedito se encontraba originalmente en Plaza España, pero debido a las reformas que allí se realizaron, fue trasladada a las afueras de la parroquia, lo que pudo facilitar el accionar delictivo.
Las autoridades eclesiásticas expresaron su preocupación por el hecho y solicitaron mayor seguridad en la zona para evitar futuros incidentes, sabiendo que menos de 100 metros se encuentra ubicada comisaria segunda.