
Al respecto, Medina precisó que el vehículo transportaba “un oxidante, una solución acuosa que puede ser diluida entre un 10% y un 60% dependiendo de las indicaciones o el requerimiento de la empresa que lo adquiere”, siendo una de las principales características de peligrosidad y seguridad pública que “estas sustancias, al entrar en contacto con combustibles, pueden reaccionar violentamente y, en caso de sumar madera o papel, pueden llegar a sobre oxigenar la combustión y acelerar el incendio”.
En base a esto, apuntó que “si bien está especificado de mediana peligrosidad, a la hora de intervenir hay que tomar ciertos recaudos” para controlar el esparcimiento de la sustancia.

Procedimiento
A raíz de esto, mencionó que “siguiendo el procedimiento, se identificó el producto a través de la cartelería que llevan los camiones” y se actuó en base a “las guías de respuesta a emergencias” dispuestas por los organismos públicos que regulan estas situaciones.De esta manera, Medina apuntó que debieron “hacer un dique de contención con arena para tratar que la sustancia no se siga esparciendo por el terreno y, además, tenemos que dar aviso a dos entidades públicas que nos asesoran y nos brindan mayores datos y precisiones sobre la sustancia”.

De esta manera, tras 24 horas desde que ocurrió el accidente, alrededor de las 9:30 se pudo retirar el cuerpo del chofer del camión fallecido y dar lugar a los trabajos para normalizar la escena, que se debió cerrar en el sentido norte sur, permitiendo el tránsito asistido únicamente en el carril de la mano contraria.