Según las presunciones de algunos bañistas que todavia disfrutaban del lugar, la persona habría esperado que los guardavidas retiraran el boyado de seguridad para ingresar a nadar, hasta llegar a una zona muy alejada de la orilla. Fue en ese momento cuando empezó a dar manotazos hasta desaparecer de la superficie del río Uruguay. Los primeros en llegar al lugar fueron los efectivos de la Guardia de Seguridad Urbana, que dieron aviso inmediato a la Policía de Entre Rios y a la Prefectura Naval, quienes hasta pasadas las 22 hs. trataban de dar con el cuerpo de la víctima, que fue identificado como Paulo Castro.
Tal como se señaló, este hombre de 42 años estaba en compañía de otras dos personas, quienes señalaron a los uniformados que Castro había salido hacia pocas horas como paciente del Área de Salud Mental del hospital Felipe Heras.