A través de la enseñanza del hockey, Los Espinillos, ha constituido un espacio de integración y desarrollo para niños y jóvenes. “Antes del receso tuvimos dos encuentros con el Club Pesca y eso les sirvió mucho de incentivo para seguir entrenando y trabajar en equipo”, comentó Almeida quien dirige el grupo desde el año 2020.
Por su parte, la entrenadora contó que “el acercamiento con el club se dio gracias a un colega y vecino mío Rafael Lezcano. Me comentó que el club estaba buscando una profe para iniciar con la actividad deportiva y de inmediato comencé”. “Es una experiencia muy linda, de la cual aprendes día a día y das siempre lo mejor en cada entrenamiento para que ellos vuelvan felices y tengan ganas de seguir entrenando”, agregó.
A continuación, sobre la planificación que lleva adelante señaló que “los hago trabajar a todos juntos, es decir, realizo juegos en los que puedan participar todos por igual y actividades ligadas a la técnica. Dejó que a la hora de jugar experimenten a su gusto y así también puedan aplicar un poco de táctica”.
“Implemento mucho los trabajos en equipos, me gusta que sean unidos y que aprendan a compartir y ayudarse entre ellos. Les enseño que todos son iguales y poseen los mismos valores y derechos que los demás”, añadió.
Por último, la coach hizo un análisis del semestre, “a pesar de que la pandemia nos sirvió mucho, han avanzado en algunos aspectos y se han sumado varios alumnos/as. Verlos todos juntos es una hermosa satisfacción”.
“Este año mejoraron en el sentido del compañerismo entre ellos. Antes solo tenía un alumno varón y nunca tuvo problema para relacionarse con las niñas, pero a veces ellas marcan esa diferencia y a lo largo de todos estos meses se notó más la unión y que todos son un solo equipo”, concluyó.