La actividad fue organizada por la profesora Marcela Cabrera y estudiantes de cuarto año del ciclo orientado en Comunicación de la Escuela “Borges”. Hubo risas, momentos más emotivos y mucha curiosidad de parte de los jóvenes reporteros. Todo transcurrió bajo un clima ameno y la compañía de docentes y personal directivo, encabezado por la rectora Lorena Acevedo.
Posteriormente, fue el turno de la ceremonia de inauguración del mural que luce en la ochava del edificio escolar, en la esquina de Lamadrid y avenida Salto Uruguayo, en Concordia. Además de los mencionados artistas, aportaron sus pinceladas alumnos de segundo año de “La Borges”, bajo la compañía de la profesora Florencia Collomb. Antes del descubrimiento del mural, hablaron los autores Jorge Zárate y Mauro Sánchez y para correr el lienzo y mostrar la obra a los presentes se convocó a representantes de los dos clubes que lo formaron: Los Espinillos y Salto Grande. Además pasaron al frente la mamá y hermanos de Marco Kremer.
“La verdad es que es algo muy lindo. Te llena de orgullo verlo, en la escuela donde él venía, donde tantos amigos hizo y donde arrancó a jugar al rugby es muy lindo”, reflexionó Matías Kremer, uno de los hermanos de Marcos.
Recordó, visiblemente emocionado, que ha sido “un año muy duro para nosotros” -en marzo último falleció Fabián, el papá de ellos- “y ver a gente de los clubes de Concordia que lo apoyan siempre y a los chicos de la escuela que pusieron su granito de arena en este mural es muy lindo. Es una caricia”.
A partir de ahora, el mural con Marcos Kremer vestido de celeste y blanco, envuelto en una bandera argentina rodeada de laureles es parte del patrimonio urbano de Concordia. Un punto de encuentro entre la educación, el deporte y los valores de pertenencia, perseverancia y constante esfuerzo por alcanzar sueños que representan el Puma concordiense.
Palabras de la directora
El mural realizado en la Escuela Nº 6 «Jorge Luis Borges» rinde homenaje a uno de los grandes valores del rugby argentino: Marcos Kremer. Esta obra, que adorna una de las paredes del establecimiento educativo, no sólo celebra los logros deportivos del joven jugador, sino que también simboliza el esfuerzo y la dedicación que lo han llevado a destacarse en su disciplina. En palabras de Borges, «El éxito no es siempre la victoria, sino la lucha». La lucha constante de Kremer, tanto en el campo de juego como en su vida personal, es un ejemplo de perseverancia y superación que inspira a las futuras generaciones.En este marco, la directora del establecimiento escolar, Lorena Acevedo, dialogó con 3200, el código del deporte, y compartió sus sensaciones tras involucrarse en este proyecto realizado bajo la dirección de este medio, en conjunto con los artistas Jorge Zárate y Mauro Sánchez.
“La verdad es que cuando nos acercaron esta propuesta, para nosotros fue una enorme alegría. El reconocimiento a nuestro exalumno es un orgullo, y haber sido parte de su adolescencia y formación también lo es. Fue una oportunidad muy importante para trabajar con nuestros estudiantes. Para nosotros, pensar en Marcos como un referente cercano, un referente muy nuestro, alguien que transitó nuestras aulas y que hoy es un ejemplo para los estudiantes, fue muy especial. A través del deporte, el esfuerzo, la determinación, los sueños y los proyectos se logran, y Marcos es un claro ejemplo de ello”, destacó Acevedo.