"Concordia, junto con su zona de influencia ha sido y es epicentro del desarrollo para una fruta tan noble que requiere capital y mano de obra intensivo", destacó.
Convivencia y consumo
Respecto a la llegada al mercado interno y a la producción de la región, Pazos mencionó que se trata de avanzar al respecto, dado que "es una fruta que convive y es complementaria al cítrico". "En la zona de Concordia el citrus es de invierno y el arándano es de primavera/verano", apuntó. Subrayando que "resultan ideal para esta convivencia".
El socio del Comité Argentino de Arándanos recordó que la producción arrancó en Buenos Aires "pero después se fueron encontrando mejores condiciones de suelo y de agua; primero en el NEA y posteriormente en el NOA".
Eso - a su vez - redundó en aumentar los volúmenes exportables "buscando satisfacer la demanda" pero luego "en los años que siguieron fuimos viendo mucho interés por parte de los consumidores argentinos". De hecho, resaltó, en la actualidad "es un mercado más", remató.