“Charlie, Charlie. ¿Estás ahí?”. Ese es el llamado con que se inicia un juego popularizado por estos tiempos, especialmente entre los adolescentes. Aunque existe una polémica acerca de su origen, algunos especialistas hablan más de publicidad encubierta que de verdadera práctica espiritista casera, lo concreto es que ha ganado lugar entre los jóvenes y empieza a ser visto de reojo por padres y maestros. Su práctica ha sido viralizada y potenciada por el uso masivo de las redes sociales.

El juego, si vale el término, consiste en dividir una hoja de papel en cuatro partes y escribir "Sí" y "No", en los distintos espacios. Luego se cruzan dos lápices, uno encima del otro y lo que sigue es una supuesta invocación al “espíritu de Charlie”, que algunos consideran el “mismo demonio”. Es similar al viejo juego de “la copa” o el tablero Ouija, pero esta vez estimulado desde las redes sociales.

En diálogo con Diario Río Uruguay, la directora Departamental de Escuelas, Griselda Touliet, admitió que se trató el tema con las supervisoras de la repartición. El objetivo fue difundir pautas a los docentes para debatir “con los chicos de cada escuela y que le explicaran, a su vez, acerca del porque no lo deben hacer”
Touliet se encargó de aclarar el origen del polémico juego, que ha encontrado eco entre los alumnos: “lo sacan desde la web”.
Con respecto a las escuelas secundarias “nadie ha presentado nada sobre este tema”, aunque admitió que “los rectores suelen conocer casos aislados”, aunque “los supervisores no son comunicados de tales hechos; entonces se va a elaborar un documento que va a consistir en que las escuelas informen a la Departamental para que luego se pueda trabajar desde la institución; como se ha hecho en casos que han surgido en el nivel primario”, detalló la funcionaria.

“Además participamos de la capacitación que organizó el municipio de Concordia, desde el área de Desarrollo Social, sobre los riesgos en Internet, denominado Con Vos en la Web. Los alumnos de sexto grado y de primer año son los más vulnerables en el manejo de las máquinas y de dejarse llevar por todo lo que aparece”.
Consultada acerca de casos concretos registrados en Concordia, Touliet no especificó. Sólo se limitó a comentar la generalidad de un hecho aislado, reportado por una docente. “La supervisora le dijo a la docente que lo trabajaran en clases y que les explicarán a los chicos lo que era y cómo era.  Es decir, lo trabajaron y trataron internamente en la escuela y la situación no volvió a ocurrir”.

Por último, la funcionaria valoró las herramientas pedagógicas que se brindaron en el recientemente realizado taller “Con Vos en la web”. “Los alumnos y docentes que asistieron van hacer de efecto multiplicador. Es decir vamos a tomar algunos aspectos de esa capacitación para todas las instituciones”, explicó

“Entendemos que con los chicos hay que ser claros para explicarles las cosas y también hablar con los padres”, sentenció la funcionaria.