Camejo destacó que esto “es un problema muy grave en la citricultura, que hoy está en plena temporada” porque “debe haber más de 200 empresas, mal llamadas así porque su gente está en negro total”. Asimismo, aclaró que “hoy el 98% de las empresas están en negro, trabajando en la ilegalidad total”.
De este total de empresas, "únicamente Argencitrus les está pagando a los trabajadores el futuro aumento que dio el gobierno, pero las otras empresas lamentablemente no pueden pagarlo porque tienen irregularidades totales”.
Por otro lado, Camejo especificó que “una empresa grande como lo es Salerno, le está debiendo a los trabajadores retroactivos desde el año pasado y los $5000 para los trabajadores que dio el gobierno, jamás los pagó”. Esta, a su vez, también es una empresa que “tiene a sus trabajadores en formar irregulares, porque trabajan entre 11 o 12 días de la quincena, pero en el recibo figuran únicamente 2”. Al mismo tiempo, los empleados “reciben amenazas diciendo que los van a echar porque la situación está mal” pero, según las palabras de Camejo, “desde que yo conozco a Salerno están mal y nunca bien”.
En cuanto al resto de las agencias de servicio que tampoco cumplen con las normas reglamentarias, el dirigente gremial lamentó que “tampoco tenemos apoyo de ningún lado y jamás nos llamaron para ver cómo está la situación de los trabajadores” lo que motiva a las empresas a “abusar de esta pandemia y del aislamiento social, ya que no podemos acudir a entes como el Ministerio y la Secretaria de Trabajo, porque no están atendiendo”.
El aumento de la fruta
Por otra parte, Camejo afirmó que “nos hemos enterado de que las frutas cítricas se han vendido a muy buen precio” y agregó que “los empresarios citricultores se han llenado de plata vendiendo el citrus a Buenos Aires y los mercados internos de todo el país”.Sin embargo, este gran aumento de los ingresos “no le llega a los trabajadores, porque no han tenido ningún aumento” y ni siquiera “han percibido el aumento de lo que ha dado el Presidente de la Nación, porque los empleadores se ven favorecidos por esta pandemia y su aislamiento”. Esto les resulta muy complicado porque “a ellos los pueden llegar a atender desde el poder político, pero jamás atenderán a algún representante de los trabajadores y la verdad es que lo están pasando muy mal, la clase trabajadora del citrus la está pasando muy mal” reiteró.
