Se estima que en Argentina, más de 70.000 personas son sordas y alrededor de 450.000 presentan algún tipo de discapacidad auditiva. De acuerdo a los datos estadísticos sobre discapacidad en el país, un 9,3 por ciento de las personas con discapacidad, presentan algún tipo de deficiencia sensorial auditiva.
Este problema representa una carga económica y social muy importante ya que afecta en múltiples aspectos el desarrollo de las personas. Y es que la audición cumple un rol fundamental en la comunicación, la educación, la interacción social y en la salud integral.
Muchas de las causas de la pérdida de audición se pueden prevenir con una simple consulta profesional. Entre ellas, enfermedades comunes del oído, distintos tipos de infecciones, que al igual que la exposición al ruido y a productos químicos, ponen en peligro la audición de las personas de diferentes edades.
“Desde un punto de vista mecánico, el oído es un transductor de señal que capta una perturbación del medio, la propaga, modifica y transforma en señal eléctrica para enviarla al cerebro que la procesa, la interpreta y le da sentido”, explica Carlos Albornoz, jefe del Servicio de Otorrinolaringología y Cirugía de cabeza y cuello del hospital Materno Infantil San Roque de Paraná, para remarcar la relevancia de este sentido.
En la misma línea, el profesional también puso de relieve la necesidad de realizar controles con los profesionales que integran los equipos multidisciplinarios, para contar con un diagnóstico oportuno, ya que en la actualidad existen procedimientos y tratamientos que facilitan la integración y el desarrollo de las personas con este tipo de discapacidad.
Datos de la OMS
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) se estima que más de 1.000 millones de jóvenes corren el riesgo de sufrir una pérdida auditiva permanente, a menudo sin saberlo, al escuchar música a alta intensidad durante largos períodos de tiempo. Además, la pandemia de Covid 19 ha puesto de manifiesto la importancia de la audición, los cambios en las formas de comunicarnos nos hicieron depender como nunca antes de ella.
El Informe Mundial sobre la Audición, un reporte de la OMS, da cuenta de la importancia del diagnóstico y detección precoz; y señala que gracias a los avances en el campo de la tecnología auditiva, el diagnóstico temprano permite identificar las enfermedades del oído y la pérdida auditiva a cualquier edad y en cualquier entorno.
En él se señala que “el tratamiento médico y quirúrgico, los audífonos, los implantes cocleares, la terapia de rehabilitación, el lenguaje de signos, entre otros, son soluciones que pueden garantizar que las personas con enfermedades del oído o pérdida auditiva accedan a la educación y la comunicación y, por lo tanto, tengan la oportunidad de desarrollar su potencial”.
