En diálogo con este medio, repasó que a su padre lo intervinieron quirúrgicamente para detener la hemorragia interna que le provocó la caída y que para lograr eso, en el quirófano le extrajeron uno de sus riñones y presuntamente también el bazo.
“Ahora es un minuto a minuto mientras esperamos que mejore”, señaló Leonardo, solicitando que la comunicad de concordiense siga acompañando con las cadenas de oración.
Por otro lado, aclaró que su padre no cayó desde la altura de una torre, sino que se rompió el techo sobre el cual se movilizaba cuando reparaba la antena de un equipo de transmisión. “Si caía desde una altura más grande hubiera sido peor”, señaló su hijo.
Vale recordar que Benítez terminó cayendo en el interior de una sala de espera de una clínica privada de Salto, mientras varios pacientes esperaban ser atendidos en el policlínico ubicado en la calle Artigas al 900.
