Estos arácnidos prefieren los lugares oscuros y húmedos, como sótanos y túneles. Se alimentan de cucarachas, grillos y demás insectos, y son más activos durante la noche. Por tal motivo, desde la Dirección General de Epidemiología recomiendan desengrasar los desagües, usar rejillas sanitarias o colocar tela plástica de trama fina, como así también controlar que no haya grietas groseras en las paredes y colocar burletes en las luces de las puertas, para impedirles el ingreso.
En el ámbito peridomiciliario, es necesario evitar la acumulación de escombros, hojas y materiales en desuso, y controlar la basura para reducir la cantidad de insectos. En áreas rurales, pueden estar debajo de cortezas de árboles, piedras o ladrillos, por lo que no deben removerse directamente con las manos. Como última alternativa se puede recurrir a la fumigación, siempre y cuando sea con asesoramiento especializado.
Como medidas de protección personal, la recomendación es revisar y sacudir bien las prendas de vestir y el calzado antes de usarlo o bien dejarlas guardadas en una bolsa cerrada. Las camas de adultos y niños deben estar separadas de las paredes, y en el caso de las cunas se sugiere colocar frascos de vidrio en las patas, ya que los alacranes solo trepan por superficies rugosas.
Además, es necesario tener precaución al examinar estantes y cajones, no caminar descalzo por las noches y siempre prender las luces.
En caso de sufrir una picadura, se debe colocar hielo en la zona afectada ya que actúa como anestésico y vasoconstrictor, haciendo que el veneno se difunda más lento. En tanto, también resulta indispensable concurrir al centro de atención más cercano para evaluar el caso y determinar si es necesario colocar o no antiveneno, el cual se utiliza solo en casos moderados o graves. Si bien el dolor es fuerte e inmediato, no representa un parámetro de gravedad.
La jefa del Centro de Información, Asesoramiento y Asistencia Toxicológica de Entre Ríos (Ciaater), Analía Corujo informó que la mayoría de los casos son leves y no requieren más que analgésicos. En tal sentido, resaltó que no es necesaria la administración de corticoides porque empeoran el cuadro.
“El mecanismo de acción del veneno de los escorpiones no provoca reacciones alérgicas, así que por más que la persona sea asmática o alérgica solo lleva antiveneno porque el cuadro clínico lo amerita” mencionó.