Al constituirse en el lugar, se pudo comprobar la veracidad del hecho, siendo la propia víctima quien declaró que su pareja la había amenazado de muerte; por lo que de forma inmediata el personal policial redujo y detuvo al agresor.
Luego se efectuó una requisa domiciliaria y si bien no se pudo hallar un arma de fuego, este medio pudo saber que horas más tarde, un familiar de la víctima entregó a la fuerza policial, un arma que el cual el agresor habría tenido escondida en una de las habitaciones.
Se puso en conocimiento de lo sucedido a Unidad Fiscal, desde donde se dispuso la detención del agresor por lesiones y amenazas en flagrancia.
