El desencadenante fue el olor putrefacto que los propios vecinos alertaron con varios llamados.
Cuando ingresaron los uniformados, pudieron observar que, en una de las habitaciones, había un cuerpo de sexo masculino, colgado desde el cuello, sin vida, visiblemente desde hace varios dias.
Todo se comunico a la fiscal Julia Rivoira, quién dispuso intervención de Criminalistica, médico de policía, forense, y bomberos zapadores para el traslado del cuerpo a la morgue para autopsia e identificación del cadáver. Es que no se encontró documentación con la que se lo pueda identificar.