En principio, la Justicia no hizo lugar al planteo de nulidad que había realizado la abogada de Bonelli con respecto al dictamen del fiscal federal.
No obstante, sí se otorgó la prisión domiciliaria con tobillera electrónica, medida que se efectivizaría la próxima semana. Este pedido había sido requerido por la letrada en abril.
Vale recordar que oportunamente se había solicitado la excarcelación de Bonelli, planteo que fue rechazado por el Tribunal actuante.
Por otra parte, se imponen reglas de conducta para el detenido, como así también la prohibición de salida del país, además de la vigilancia electrónica. También se comunica de la resolución a la Unidad Penal 3 de Concordia donde se encuentra alojado, para ultimar los detalles sobre el trasladado al domicilio donde cumplirá con el arresto, bajo la garantía de dos de sus familiares.
En los considerandos, se alude que “a efectos de asegurar la comparecencia de BONELLI al proceso de extradición en curso, y con el objeto de neutralizar los riesgos procesales que trae aparejado la morigeración de su detención, le impondré -además de la colocación de un dispositivo electrónico de seguimiento (GPS)- las siguientes medidas de coerción y reglas de conducta (art 210 del CPPF, inc. a, b, c, e y j)”.
Asimismo, la resolución judicial evalúa ampliamente los motivos que llevaron a tomar la decisión de conceder la prisión domiciliaria, vinculados al bien superior de los niños hijos del detenido.
“Con respecto al análisis de los riesgos procesales, debo necesariamente ponderar – en primer lugar – que entiendo que para disponer el arresto domiciliario con seguimiento electrónico, el arraigo exigido por la norma estaría suficientemente acreditado. En efecto, la defensa de Bonelli logró acreditar (mediante el aporte de testimonios de vecinos y la documentación incorporada al incidente) el arraigo mínimo exigido, ya que Bonelli no posee antecedentes penales, cuenta con un domicilio fijo en donde permanecerá detenido (perteneciente a su madre), y posee lazos familiares sólidos teniendo a su cargo dos menores de edad; mientras que se confirmó que su pareja, podrá salir a trabajar para solventar los gastos diarios. Ello, sumado a que con las medidas de coerción que se dispondrán (cfr. art. 210 del CPPF), y en particular con la colocación de la tobillera electrónica que se gestionó por medio del Ministerio de Justicia de la Nación (cuyos especialistas – como se dijo – dictaminaron favorablemente), se logra neutralizar – al menos de momento – el riesgo de fuga”, suma otro párrafo de la extensa resolución.
Cabe recordar que Bonelli fue detenido el 21 de marzo pasado, en virtud de la solicitud de captura internacional con miras de extradición librada por la INTERPOL. El proceso de extradición está en marcha.
Se lo vinculó en una investigación que se realiza en Venezuela por supuesta trama de corrupción a través de PVDSA (Petróleos de Venezuela Sociedad Anónima), exportando mediante empresas ‘fantasma’.
Bonelli se habría relacionado laboralmente a uno de los empresarios involucrados e incluso figuraría como titular de una de las empresas ‘fantasma’ investigadas.