La pasión despertada en los jóvenes habría molestado al propietario del boliche bailable, según dieron cuenta otros jóvenes quienes estaban a su alrededor, los cuales fueron testigo de cómo fueron separados por la seguridad policial del boliche.
Al tiempo que los funcionarios le advirtieron que “si seguían, iban a ser expulsados del lugar", comentaron los testigos.