Por este crimen de inmediato fue detenida su entonces pareja, el sargento de policía de la sección de Infantería Fabían Casas, un hombre de 40 años que convivía con la joven desde hacía tres años y con la cual ya tenía un hijo que cumplía su primer año de vida un día después del sangriento hecho.
Una vez que concluida la etapa de la Investigación Penal Preparatoria (IPP) se remitirá la causa a juicio, pudiéndose conocer el testimonio que dio Casas en octubre pasado, acompañado por su abogado Pedro De Lamadrid y frente al fiscal Mario Guerrero. El mismo será de público conocimiento recién en el inicio del juicio oral.
Vale recordar que las pericias solicitadas por la fiscalía concluyeron en que el arma secuestrada es apta para producir disparos y se corroboró que los proyectiles vinculados a la causa corresponden a la misma.
De acuerdo al testimonio de familiares de la víctima, el hecho fue el epílogo de una de las habituales discusiones de la pareja, jaqueada por los enfermizos celos del numerario policial que pretendía ejercer un férreo control sobre todas y cada una de las actividades sociales de Mariana, frecuentemente amenazada para que no se mueva de su casa.