Allí, un hombre fue descubierto cuando pretendía salir del local sin abonar dos paquetes de carne. Había sido interceptado en la puerta por un empleado del comercio, quien le exigió que exhibiera la bolsa, sacando luego la mercadería de entre sus ropas.
Una vez identificado, el hombre de 51 años, quedó alojado en Alcaidía por el delito de "hurto en flagrancia".