Siempre de acuerdo a las primeras confirmaciones, la tragedia ocurrió en el domicilio de un suboficial de la policía de Entre Ríos (que forma parte del cuerpo de Bomberos Zapadores), donde un hijo de este funcionario fue encontrado con un disparo en la cabeza, desconociéndose las circunstancias en las que se produjo el disparo, aunque una de las hipótesis mencionaba un disparo accidental luego que el niño encontrara el arma reglamentaria de su padre en la parte superior de un placard.
Ante semejante cuadro, los familiares del menor lo llevaron primeramente al Centro de Salud del mencionado barrio La Bianca, desde donde en ambulancia se lo trasladó al hospital Delicia Concepción Masvernat, donde ingresó con un cuadro “desesperante”, por una herida de bala “en zona de cráneo, con entrada y salida”, según una fuente médica consultada por este medio.
Las actuaciones quedaron a cargo de personal de la Comisaría 6ta, bajo las indicaciones del Dr. José Arias en representación del Ministerio Público Fiscal.