Siempre de acuerdo a la versión de Romero, el allanamiento tuvo lugar alrededor de la 1.30hs. en la noche del lunes, en una vivienda ubicada en calle Doctor Florenza y cortada 53. “Nosotros estábamos durmiendo y apareció la policía diciendo que era un allanamiento, rompiendo puertas. Nosotros no entendíamos el motivo y cuando pregunté nos apuntaban con las armas y no nos explicaban”, relató la cocinera.

Párrafo seguido mencionó a Diario Río Uruguay que según pudo conocer “buscaban a un joven que sería el asesino de una persona y nos decían que nosotros lo teníamos adentro de mi casa escondido. Buscaban a un pibe que dicen que se llama Mauro Beherens y les dije que no lo conocíamos”.

“No entendíamos a quien buscaban porque no tenemos ninguna relación con esta persona, sí se rumorea que esta vinculado con el homicidio de dos abuelos ahí en el barrio San Miguel”, amplió diciendo la mujer. Así mismo expuso que los agentes que participaron del allanamiento “nos insultaban y rompían las puertas. Tiraban las sillas y mesas”.

“En la búsqueda revolvieron un ropero y dieron vuelta la casa buscando a esta persona”, indicó, para añadir: “somos unas 10 personas las que vivimos ahí y entre ellos hay un nene de 10 años con síndrome de down”.

“Hicimos una denuncia en la fiscalía para hacer una contradenuncia, para dejar constancia que rompieron cosas, que nos gritaban y nos hacían callar”, subrayó Romero y recalcó que según les explicaban los uniformados “buscaban armas además pero nunca encontraron nada. No hubo respeto en la forma en la que actuaron. Sentimos una impotencia hacia la policía en la forma que nos trató”.

Sobre el final responsabilizó al Jefe de Investigaciones Guillermo Ocampo de haber supervisado el operativo. “Estuvo presente en el operativo porque desde la esquina vigilaba todo y por la forma de vestir y moverse creo que los que intervinieron son los del grupo GEO y el fiscal en ningún momento estuvo presente”, reprochó.