Los que si seguirían siendo de interés para la causa se concretaron en un centro de rehabilitación que funciona en calle Güemes, en uno de los laterales del Colegio de los Padres Capuchinos y otro en un domicilio de calle Carriego, en proximidades del Juzgado Federal de Concordia, que tiene sus oficias en la parte posterior del ex Policlínico Ferroviario.
Según trascendió en uno de los operativos realizados este sábado, los procedimientos fueron -nuevamente- ordenados por la jueza federal Sandra Arroyo Salgado, en el marco de la causa que se tramita en el Juzgado Federal de San Isidro y, aparentemente, se habrían originado por elementos hallados en la requisa que, este viernes, se realizó en el despacho que pertenecía al ex legislador.