Esta resolución, explicó Lima, se basa en la propagación exponencial del coronavirus en los últimos días, tanto en la ciudad como en el interior. "El virus se ha propagado en todo el departamento, por eso hoy el principal objetivo es frenar la movilidad", enfatizó. A la fecha hay en Salto más de 550 casos activos y la situación se ve agravada por la irrupción de la cepa P1 conocida como cepa de Manaos.
"Para tomar esta medida, el gobierno departamental toma en cuenta todo el derecho uruguayo", dijo Lima. Además de lo dispuesto por el Poder Ejecutivo en el decreto presidencial, que exhorta a cerrar los centros termales durante la Semana de Turismo, cabe resaltar que es atribución constitucional de las intendencias velar por la salud pública de la población, tal como lo establece la carta magna en su artículo 275 numeral 9.
En tanto que la ley orgánica municipal establece que compete al Intendente ejercer la policía higiénica y sanitaria del departamento, sin perjuicio de la competencia de las autoridades nacionales (artículo 35 numeral 24 de la ley 9.515). "El organismo rector es el Ministerio de Salud Pública, pero las intendencias tienen competencia propia en materia de salud pública", señaló.
"Toda la comunidad científica de este país está de acuerdo en la necesidad imperiosa de una disminución sustancial de la movilidad. Y esa es la postura de la Intendencia de Salto. Sabemos que es una semana muy importante, somos conscientes de que este tipo de medidas trae consecuencias en el ámbito laboral y estamos dispuestos a dialogar con el sector turístico. Pero nuestra obligación es defender y velar por la salud de 130 mil salteños, priorizamos la salud por sobre todas las cosas. Apostamos por la vida de los salteños y de todos los uruguayos", concluyó el jerarca departamental.
