De acuerdo a los datos que pudo recabar Diario Río Uruguay, hace más de un mes la empresa concesionaria -que ganó la licitación por tres años en el 2012- presentó una carta documento en el municipio dando a conocer oficialmente su intención de no hacerse cargo de la fiesta en su próxima edición.

Hasta el comienzo de esta semana dicha misiva no habría tenido una respuesta formal, aunque hubo algunas reuniones entre autoridades locales y provinciales para convencer a la empresa que cumpliera con el último año que resta por contrato.

Mientras tanto, en lo que respecta a las agrupaciones que compiten por el campeonato, todas han ingresado en una intensificación de sus ensayos y avances en los respectivos espectáculo que presentarán en la manga de desfile.

Incluso está previsto que en los próximos días se entreguen los galpones del corsódromo por parte del Ente Permanente de Carnaval, el organismo autárquico que reúne a diferentes sectores relacionados con la fiesta.

Por otro lado, por lo bajo ya son varios representantes de comparsas que comienzan a preguntarse quién se hará cargo de adelantar el dinero correspondiente al último puesto y que por estatuto debería ser garantizado en el mes de noviembre.