Sin embargo, este jueves el trabajador encargado de retirar el módulo “estaba demorado”, por lo que “le dijimos al hombre que tenía que esperar entre 10 o 15 minutos”, destacó Primitivo. Además, aclaró que “esta persona suele venir muy prepotente, pero no como esta vez, que estaba totalmente sacado e insultó, pegó en los vidrios, amenazó al personal de seguridad y al personal administrativo”.
Debido a su accionar, desde la dirección “lo tratamos de calmar, yo salí y le expliqué que había chicos en tratamiento, niños y adultos que tienen que estar tranquilos, pero él seguía gritando, haciendo ademanes y golpeando los vidrios de la institución”. Es por eso que “lo invité a hablar en la vereda”, pero, “cuando salimos, sacó un cuchillo y me lo tiró al cuerpo”, precisó Marcelo.
Afortunadamente, el funcionario pudo esquivar el ataque, pero “el tipo seguía enojado, irritado, se tiró en la calle, cortó un rato el tránsito y tuvo que venir el comando radioeléctrico para sacarlo de la calle”, recordó. Para entonces, el módulo alimentario por el que el hombre se había acercado a Discapacidad habría llegado y desde la dirección “se lo quisimos dar, no lo quiso recibir y se fue”. No obstante, Primitivo comentó que “a los 2 o 3 minutos, calculamos que, en la esquina de nuestra institución, se habrá cortado el brazo con un vidrio o algo y volvió, amenazando que nos iba a denunciar por lo que le habían hecho”.
Al notar el corte en uno de los brazos del hombre, “personal de la ex Asistencia, personal de salud, salió y lo quiso limpiar, pero no lo aceptó y se tiró en la esquina de Saavedra y 25 de mayo”, mencionó. En consecuencia, al lugar “llegó el 107 y tampoco aceptó ser trasladado”.
“Para eso, yo ya me había ido a la Jefatura Central para hacer la denuncia y, cuando regresé, lo había visto el médico policial, estaba más calmo, tomó el módulo y se retiró”, precisó Primitivo.
Teniendo en cuenta este tipo de situaciones, Marcelo valoró que “siempre le recuerdo al personal que estamos en un área en la que trabajamos con discapacidad y somos muy flexibles en horas de tolerancia, pero ellos también deben tener sus obligaciones”, motivo por el que “lo de este jueves fue la gota que rebalsó el vaso”.
Esta fue “la primera exposición policial que hice en estos 4 años, más allá de que hemos pasado situaciones similares y mucho más difíciles con personas psiquiátricas”, determinó el entrevistado.