
El niño, según se pudo saber, sería hijo de un agente de Gendarmería Nacional, lo que explicaría el origen de la munición que manipulaba.
La situación habría sido denunciada anteriormente por la persona encargada de transportar al estudiante, quien lo habría visto cargar con los elementos camino a la escuela y por una madre de la institución, quien se había enterado de que el niño habría estado regalando balas y prometió llevar más el día siguiente.
Tras tomar conocimiento de la situación, la escuela se contactó con la madre del estudiante, quien se acercó para retirarlo del lugar a media mañana de este viernes. Mientras tanto, personal de División Criminalística de la Jefatura Departamental Concordia se hizo presente.