Fuentes oficiales informaron que la medida es una decisión del ministro de Desarrollo Productivo, Marías Kulfas, que en las próximas horas firmará el Secretario de Energía, Sergio Lanziani, y alcanza la generación vieja o spot, comprendida en la Resolución 1 del 2019 que recibe una remuneración definida por la autoridad de aplicación.
La medida será de aplicaciones para las transacciones a partir de 1 febrero de 2020, y según estimaciones oficiales la decisión tendrá un impacto superior a los US$ 300 millones de dólares anuales en los ingresos de las empresas.
El segmento de la generación de energía tiene un impacto del orden del 50% en la factura de electricidad, en tanto que la transmisión y la distribución del sistema se reparte el restante 50% de las facturas.
La resolución que será publicada en los próximos días en el Boletín Oficial dispondrá la «reducción de la remuneración que perciben las generadoras de energía “spot” y su pesificación», y alcanzará a las represas y a grandes generadoras que cuentan en su parque con varios equipos denominados «viejos» y de menor eficiencia.
El segmento spot se refiere al mercado de precios horarios en los que se comercializa la energía no sujeta a contratos de abastecimiento con la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa), cuyo precio de la energía eléctrica se define en función del costo marginal.
La medida no alcanzará a las inversiones que se vienen registrando, al menos, en la última década que modernizaron el parque de generación eléctrica, que son equipos mucho mas eficientes y vitales para cubrir los picos de demanda o la entrada rápida al sistema en caso de imprevistos en la red.
Adicionalmente, la normativa determinará «la pesificación de las remuneraciones por generación de energía de las centrales hidroeléctricas binacionales», es decir la represa de Yacyreta que se administra con Paraguay; y la de Salto Grande con Uruguay.
De esta manera, en el Ministerio de Desarrollo Productivo del cual depende la Secretaría de Energía, se estima que «el costo de energía eléctrica caerá aproximadamente de 69 a 60/62 dólares por Mw/h y redundará en una baja importante de generación».
En el gobierno se explicó que «entre 2015 y 2018 la remuneración que recibieron las empresas por la electricidad aumentó un 60%», a partir de una decisión de la administración de Mauricio Macri.
La resolución 1 fijaba para 2019 por el entonces secretario de Energía, Gustavo Lopetegui, determinó un desembolso de US$ 1.344 millones, con una reducción promedio del 15% que según las empresas afectaría su nivel de inversiones.
La nueva resolución que se dará a conocer en las próximas horas dispondrá un gasto para el Estado de US$ 1.026 millones, es decir una reducción de US$ 318 millones, casi el 24% en promedio.
El precio de la energía está congelada en la práctica desde marzo de 2019 cuando el Gobierno de Macri decidió postergar los aumentos para después de las elecciones nacionales, y a poco de asumir el actual gobierno comprometió no tocar las tarifas hasta junio, al menos, para lograr la normalización de la macroeconomía.
Los subsidios del Estado nacional alcanzan aproximadamente el 50% de ese costo de generación eléctrica, que al estar dolarizados exponen al Tesoro nacional a tener que afrontar mayores desembolsos con cada apreciación del peso.
La nueva resolución también permitirá precisar la fórmula de actualización de las nuevas tarifas pesificadas, que podría tratarse de una fórmula que integre precios minoristas y mayoristas y los períodos de revisión.