"El margen final anual - cuando sumás todos los gastos - en una estación de servicio es de un 2%", contextualizó. Subrayando que las ventas con tarjetas supone "un aproximado de entre 50 a 60%".
Inflación
Según el empresario, "todo el mundo usa tarjeta de crédito porque cuando pagan el resumen al otro mes, ya el combustible está más caro y el estacionero tiene que hacerse cargo de esa diferencia"."Ahora con una escalerita aproximada de un 4% de suba mensual, supone una pérdida de un 2% por cada litro vendido; no es posible mantener la venta cuando tu rentabilidad es negativa", puntualizó.
Crédito
Por último, Saliva contó que "esta situación se da con tarjetas de crédito, las de débito no, al igual que Mercado Pago o las aplicaciones porque la acreditación de ese dinero es inmediata o a lo sumo a las 24 horas"."Todos los estacioneros lo hemos pensado, en el país hay como 4500 estaciones de servicio y cada operador se adapta a su realidad pero no se puede vender sin rentabilidad", remató.