Al respecto, el Senasa dispuso efectuar las medidas de contención correspondientes, establecidas en el Manual de contingencia de influenza aviar, con el fin de evitar la dispersión de la enfermedad en otros establecimientos productores de aves destinadas al circuito comercial.
Debido a esto, aclararon la producción aviar para el consumo en la Argentina continuará desarrollándose con normalidad, ya que la influenza aviar altamente patógena (IAAP) H5 no se transmite por el consumo de carne de pollo y huevos.
Sin embargo, se suspenderán las exportaciones de dichos productos, en cumplimiento con las normas internacionales, lo que impactará directamente en Entre Ríos, teniendo en cuenta que la provincia concentra más del 50% del total de las áreas de producción avícola del país, seguido por Buenos Aires, con el 35,5%.
Además, cabe destacar que Entre Ríos es líder en producción y ha logrado una gran inserción de la carne aviar en más de 60 países y, el año pasado, China fue el destino de más de la mitad de los productos avícolas argentinos.
La avicultura entrerriana tiene más de 6.500 galpones de crianza de pollos parrilleros, desde donde sale más del 60 por ciento de las exportaciones de carne aviar. De los 16 frigoríficos entrerrianos habilitados, hay cuatro que exportan al gigante asiático: uno en Gualeguay (Soychú); otro en el Departamento Paraná, (Indavisa); y dos más en Uruguay (Granja Tres Arroyos y Frigorífico Avícola Basavilbaso).