En declaraciones al programa “Lo Que Queda del Día” por Oíd Mortales Radio de Concordia, Brupbacher detalló que “nosotros tenemos que empezar cinco días antes a transferir para poder comprar (dólares), porque el Banco Central nos autoriza bloques del 20% de la deuda total, así que empezamos a comprar a partir del lunes de la otra semana (29 de julio), ahí empezamos ya a hacer las transferencias para ir comprando esos bloques”.
Respecto del origen de los recursos para hacer frente a ese pago dijo que “estamos haciendo los máximos esfuerzos para poder afrontar estos compromisos. Con algunas herramientas financieras y cubriendo ahí esas cuestiones y poder cumplir también que en esta semana estamos cumpliendo con los sueldos”, dejando claro que el gobierno entrerriano deberá nuevamente pedir un préstamo para hacer frente al pago de deuda.
“Nosotros estamos trabajando a contrarreloj en un montón de cuestiones y tratando de cumplir de la mejor manera, tanto honrar las deudas que tiene la provincia, también terminamos el lunes de firmar las últimas cuatro empresas que estarían faltando para cerrar (reactivar) obra pública, estaríamos ya viendo cuál es el resultado final de las paritarias y después obviamente ya encaminado en la última etapa, el último proceso de la cuota del crédito internacional”, reseñó.
Dijo además que está descartado pedir una refinanciación, porque “los bonos y letras de la provincia, no tienen aceptación en el mercado. Los soberanos, que son los bonos nacionales, también, están por ahí copando algún dinero que anda dando vueltas, entonces es difícil salir a competir en ese sentido”. Remarcó que “hicimos todos los esfuerzos para cumplir y ver cómo podemos seguir con el vencimiento de febrero del año que viene, ya pensando en un par de meses”, en referencia al pago del siguiente cupón.
El bono ERF25 es el resultado de una reestructuración de la deuda en pesos que el gobierno de Gustavo Bordet encaró en 2017, durante la gestión nacional de Mauricio Macri, cuando la inclusión del país en los mercados financieros internacionales recomendaba cambiar el perfil de la deuda a tasas altas en moneda local por bonos en dólares con intereses mucho menores.
En virtud de las dificultades que afrontó en su segundo mandato, con Alberto Fernández en la presidencia y el acceso a dólares restringido, la gestión Bordet encaró entonces una reestructuración, al borde del default, que implicó cambios en las condiciones de pago y que la gestión siguiente a la suya encarara el 90% de las amortizaciones de capital, desde febrero de 2024.
Así, se estableció el 16 de marzo de 2021 que el capital será abonado en 12 cuotas semestrales de las cuales solamente las dos primeras y equivalentes al 10% del total se pagarían en la gestión que lo tendría como gobernador. Las cuotas pagaderas el 8 de febrero de 2023 y el 8 de agosto de 2023 fueron iguales al 5% del capital cada una y con un interés del 5,75% nominal anual. Las siguientes diez cuotas, todas con vencimiento el 8 de febrero y el 8 de agosto, corresponden al 9% del capital cada una y devengan un interés del 8,25%.
Brupbacher descartó en la entrevista la posibilidad de incumplir el pago de ese cupón, pese a las dificultades financieras: “es el mandato del gobernador, honrar la deuda de la provincia, evitarlo (el default) y mostrar siempre voluntad de pago, haciendo el máximo esfuerzo y obviamente demostrando también en estas medidas de austeridad, en este manejo de la cosa pública, haciendo lo más eficiente cada peso que recibamos, de manera de poder ir cumpliendo”.
Remarcó que “vamos a ir cumpliendo con todas las obligaciones y en la medida que después el mercado de capitales nos permita hacer una refinanciación en caso de que sea conveniente, se analizará. Así como ahora se analizaron las alternativas, se vio que no podía ser o que incluso podría ser perjudicial o podría salirnos más caro de lo que está, entonces decidimos avanzar en el pago de la cuota como viene bien hasta el momento”, explicó.
Impacto de la Ley Bases
En entrevistas anteriores, el secretario de Finanzas de Entre Ríos había alentado expectativas respecto del escenario que iba a dejar la Ley Bases. Sobre el particular dijo que “los resultados de esto impactarían en nuestras proyecciones, estimamos en el mes de agosto-septiembre, cuando se empieza a liquidar Ganancias nuevamente, y ahí obviamente veremos cómo evoluciona”.“Pero eso, -remarcó- mejoraría la perspectiva de lo que venía, lo que podría llegar a venir por Ganancias, pero hoy se nos está cayendo a pedazos, por decirlo de alguna manera, y de manera muy coloquial, lo que viene a través del consumo, o sea que, en la medida que la rueda de consumo y de la economía no empieza a girar, también podemos tener una mejora, por un lado, pero podemos tener una caída por el otro”.
Por otro lado, expresó que sigue viendo “con muchas expectativas de que lo que se firmó con la Ley Bases aliente las inversiones, que esas inversiones empiecen a instalarse en el mercado y empiecen a generar, a rodar. Creo que podríamos llegar a tener, no sé si un semestre, pero sí un último trimestre del año, un poco más tranquilo, al menos, en lo que es coparticipación y recaudación, ya no pensando en ese rebote tan pronunciado como una V corta, como se hablaba en su momento, sino más bien como una “pipa”, mucho más largo, pero rebote al fin y esperando esos resultados”.