Por lo pronto, precisó que “vamos a tener una reunión con los directivos del Senasa, pero yo creo que, como mínimo, tendremos 90 días –de suspensión– siendo alentador y, siendo pesimistas, podríamos tener 180 días”. De esta manera, manifestó que “la provincia de Entre Ríos tiene el 50% de la producción aviar, pero casi el 100% de lo que se exporta sale de nuestra provincia”, por lo que “la actividad más castigada es la nuestra”.
“Me atrevería a decir que, de las exportaciones, el 75% son de Entre Ríos, por lo que es un impacto tremendamente negativo para las finanzas de la provincia e, indudablemente, nos pone en una situación muy incómoda a las empresas, porque nos destruye por completo los ingresos y los egresos, que no sé de qué manera lo vamos a enfrentar”, puntualizó Motta.
Al respecto, consideró que “los entrerrianos vamos a tener que ponernos las pilas y tratar de ayudarnos, porque es muy grande el espectro de lo que ha generado la avicultura, a tal punto de ser una de las actividades principales de Entre Ríos” y, por el momento, indicó que “estamos en reunión tras reunión, tratando no solo de redoblar esfuerzos en cuanto a la vigilancia de nuestros establecimientos, sino también de ver cómo va a reaccionar el mercado internacional ante esta situación”, dado que “acá se estaban exportando pollitos bebés, pollos enteros, trozados, bardas y huevos industrializados”, entre otras cosas.
Medidas preventivas
Ante esta situación, Motta adelantó que “la primera medida que vamos a tomar es no para la producción de forma inmediata”, motivo por el que “vamos a recurrir a guardar el ave procesada en cámara”, actividad que “tiene un costo adicionar que no está previsto en los niveles de precios que estamos moviendo, por lo que, indudablemente, vamos a necesitar de créditos para poder sostenerlo”.Mercado interno y precios
A su vez, Motta valoró que “hay empresas como la nuestra, que tienen un 50% en el mercado interno y un 50% –del producto– en el mercado externo”, a quienes “nos pega durísimo” la situación.Debido a esto, comentó que “esto va a traer también que se vuelque mercadería al mercado interno y caigan los precios”, lo que provocaría que “se degraden los ingresos nuestros”. No obstante, aclaró que “a veces los precios bajan y nosotros lo sentimos en la cadena durante el año, pero los precios finales de venta generalmente no lo reflejan”, ya que “únicamente se refleja cuando hay un incremento de precios”.
Previsión
Finalmente, Motta agregó que “es tan tremendo todo esto que, a la desgracia de tener paradas las exportaciones, le debemos agregar la tremenda escasez de maíz por la gran sequía que padeció el agricultor”, por lo que “no tenemos maíz y la cosecha de la soja está muy deteriorada”, por lo tanto, “también el sector agropecuario está perjudicado”.Es así que “vamos a tener que recurrir a créditos especiales de los bancos, para los bancos vamos a necesitar garantías y, para las garantías, nos va a tener que acompañar el estado”, siendo esta “una cadena muy difícil de sostener”.
En cuanto a una futura solución, Motta reconoció que “hay diálogo permanente”, pero “tenemos que ser coherentes”, porque “estamos en protocolo sanitario de orden internacional y, cuando ocurren estas cosas, lo primero que tiene que hacer uno es denunciarlo, porque no podemos guardar silencio con estas cosas” y “la medida es correcta”, consideró.