El resultado fue que “para todos los bienes seleccionados y teniendo en cuenta el peso en la estructura del gasto de consumo de los hogares, es un 30,11% más caro adquirir los bienes en la ciudad de Salto que en Concordia”. En lo que respecta a Alimentos y bebidas no alcohólicas, la diferencia fue más de 30% más cara en Salto. Mientras que en bebidas alcohólicas y tabaco la diferencia es mayor y se estira a un 47% más caras.
En otros rubros como ropa y zapatos, las compras son un 17% más caras, como así también en el rubro identificado como productos para el hogar, que hoy están un 25% más caro en el vecino país. Otro rubro observado fueron las comidas fuera de casa, donde en Uruguay salen un 31% más caras que en Argentina. El informe fue dado a conocer por diario salteños, desde donde reconocer que, con excepción de los comerciantes, el resto de los salteños “esperan ansiosamente la apertura del puente Salto-Concordia para poder comprar productos y servicios a un costo de casi un 60% menos que en Salto”.
Los medios de la otra orilla, como el caso de Salto al Día, incluso hablan del “abuso que la mayoría de los comerciantes han adoptado durante la pandemia, remarcando los precios de forma constante, sin pensar en el bolsillo de aquellos que se han visto afectados”.