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Desde el CGE se informó a Bordet acerca de las determinaciones del Ministerio de Educación de la Nación, que dejó en manos de las jurisdicciones la decisión de mantener o no la obligatoriedad del uso del barbijo en las escuelas, y también del Consejo Federal de Salud, que recomendó sostener su utilización en los espacios cerrados, incluido el ámbito escolar.

“Seguimos trabajando bajo las indicaciones del Ministerio de Salud de la provincia y las recomendaciones que realiza”, sostuvo Müller.

Indicó además que se le comunicó al Gobernador que “en algunas provincias ya se había determinado que el uso del barbijo no sea una obligación sino una opción”. Del mismo modo, se le informó que sigue “en estudio en los ámbitos especializados, qué medidas tomar en función de la situación sanitaria”.

“Nosotros comunicamos todo eso y el Gobernador, en función de esas recomendaciones, tomará una determinación en los próximos días, seguramente”, adelantó el funcionario. Dijo además que no hay una fecha prevista para definir la postura que tendrá Entre Ríos y que la decisión se basará en la situación sanitaria de la provincia.

Las opciones son “si continuamos de esta manera –que es lo que recomendó el Cofesa para todas las provincias, salvo algunas excepciones en el país–, o si la provincia de Entre Ríos tomará otra determinación que cambie las definiciones que hoy tenemos vigentes”, expuso Müller en diálogo con APF.

Cabe recordar que desde el lunes 21 de marzo el Ministerio de Educación de la Nación habilitó a las 24 jurisdicciones del país a decidir si el barbijo en las escuelas seguirá siendo obligatorio. Ciudad de Buenos Aires, Mendoza y Tierra del Fuego inmediatamente anunciaron que su uso será opcional, luego se sumaron Neuquén y Río Negro. En Santa Fe la obligatoriedad se extenderá hasta que finalice el invierno, y en provincia de Buenos Aires se decidió no flexibilizar el protocolo durante marzo.

Por otro lado, las autoridades sanitarias de todo el país, reunidas en el Consejo Federal de Salud (Cofesa), consideraron necesario sostener la utilización del tapabocas y la ventilación en espacios cerrados, teniendo en cuenta “la incertidumbre respecto del comportamiento que tendrá el covid en los próximos meses” y también ante “la circulación temprana del virus de la influenza, especialmente en población pediátrica”.