La información oficial agrega que “como si ya este salvaje relato fuera poco triste”, había otra joven que mostró “tan poco amor por la vida y proceder de ser humano, que sacó de entre sus prendas su teléfono celular y comenzó a filmar a la par que festejaba semejante salvajada”.
Según se denunció, la golpiza continuaba a pesar de ser tan sólo las tres de la tarde, hasta que dos caballeros que cruzaban ocasionalmente por el lugar observaron el lamentable espectáculo, separando a la violenta joven la que no podían controlar hasta que salió de las instalaciones la profesora de gimnasia y dio inicio a la reprimenda.
La educadora siguiendo los pasos de protocolo en estos casos, dio aviso a la directora de la institución y a la madre de la pendenciera. Para sorpresa de todos los presentes esta “madre vergüenza” llegó vociferando exaltada. “Ésta es mi hija”, afirmaba, como orgullosa del accionar su revoltosa gurisa. A lo que agregó: “Pero cómo no te di un cuchillo que trajeras”.
La menor violentamente agredida fue trasladada al Hospital San Antonio para recibir la asistencia idónea como consecuencia de los fuertes golpes recibidos y luego trasladada hasta su casa.
Fuente: El Once