Con 5 años de cursado y un campo laboral totalmente demandante de este tipo de profesionales, la Ingeniería en Mecatrónica trae aparejado un gran avance para la industria de la zona tanto citrícola, forestal, avícola, láctea y alimenticia en general. Esto se debe a que la propuesta combina diferentes campos de conocimientos entre los que se encuentran la electrónica, sistemas, control, automatización, robótica, Inteligencia Artificial y los sistemas alternativos de generación de energías sustentables, entre tantos otros.
El director de la carrera, Ingeniero José Páramo, expresó “más de una vez le hemos dicho a nuestros alumnos que en esta carrera el techo es la imaginación propia de cada estudiante ya que el inmenso avance en los sistemas de control, automatización, controladores programables, el lenguaje máquina-operario, la infinidad de sensores que emulan los sentidos humanos a través de redes neuronales, entre otros, hacen la versatilidad de los futuros proyectos que se quieran afrontar.”
A su vez, Páramo confirma que “lo que hace este gran logro es apostar a los jóvenes de nuestra provincia y, por ende, de nuestro país, formando Ingenieros en Mecatrónica de excelencia con espíritu totalmente emprendedor para que el día de mañana generen empleo genuino a técnicos, obreros y operarios del sector”.
Por otro lado, el Decano de la Facultad de Ciencias de la Alimentación, Ing. Oscar Gerard, puso en el presente la forma en la que se concretó la carrera: “Hace 9 años, la UNER impulsó un plan de expansión de carreras, con la propuesta de que la universidad pueda llegar a más ciudades de la provincia. De esta forma se inició el recorrido, a través de la Tecnicatura en Mecatrónica, una carrera corta que tuvo 3 cohortes y que, luego, se transformó en Ingeniería”.
Así, la Mecatrónica tiene un recorrido de casi 10 años en la ciudad de Concordia, a través de la Facultad de Ciencias de la Alimentación, donde, a través de los primeros graduados, se empiezan a visualizar los objetivos del trabajo de tantas personas involucradas. “Es una forma de expresar y ver que los pasos se van cumpliendo. Desde la FCAL apoyamos desde el primero momento la carrera, visualizando el potencial que traía aparejado para la región, sobre todo, a partir de la sinergia que se podía generar con la Ing. en Alimentos. Hoy concretamos el primer sueño y tenemos que sentirnos orgullosos como institución.”, afirmó el decano.
Gerard agradeció el trabajo de cada uno de los involucrados en este camino: estudiantes, docentes, personal administrativo y de gestión y puntualizó el hecho de que, Rougier es quien abre el camino pero, detrás, siguen muchos otros estudiantes que cumplirán sus sueños de la misma forma y en el corto plazo, ya que la carrera cuenta con más de 100 inscriptos cada año.
El proyecto: laboratorio de I+D, prototipado electrónico
A través de la propuesta con la que Rougier se convirtió en ingeniero, se espera que el proyecto siente las bases para desarrollar un centro de innovación mediante la integración de la universidad con la industria y que permita formar profesionales con competencias en Industria 4.0 para atender las necesidades puntuales del sector en cuanto a demanda de graduados con conocimientos específicos.Así, el objetivo es la instalación en la Facultad de Ciencias de la Alimentación de un laboratorio de I+D, prototipado electrónico e impresión 3D para generar tecnología compatible con la Industria 4.0, capacitar en el uso de dicha tecnología y colaborar con las PyMEs en la adopción de las tecnologías necesarias para su incorporación a la nueva revolución industrial.
El laboratorio podrá contribuir en el diseño y la implementación de soluciones comprendidas dentro de la Industria 4.0 que posibiliten: la digitalización/gestión remota de procesos, equipos y logística, principalmente para agroindustrias; diseño implementación e innovación de soluciones de automatización en Robótica; fábricas inteligentes que permitan la obtención de información en tiempo real, para la elaboración de modelos predictivos abocados a la INDUSTRIA 4.0; dómotica y Smart Cities, entre otras.
Desde la concepción de este proyecto, esa idea estuvo siempre presente, entendiendo que, para lograr un cambio, un impacto, hay que involucrarse y hacer que suceda. En un futuro cercano se espera poder colaborar activamente con la implementación de este proyecto y así poder transformar la idea en hechos.