
Con el fin de crear conciencia en los vecinos, desde el municipio pidieron “por favor no jugar a la pelota en la plaza, ni usar el mural para recibir los pelotazos. El mural no es para eso. El mural se daña”, remarcaron.
De esta manera, instaron a seguir “disfrutando del arte y de todos los atractivos que tiene nuestro pueblo”.
Por último, valoraron como “excelente trabajo” el realizado por los restauradores Carolina Panozzo y José Palauro.