De allí que las entradas se han solicitado de lugares muy distantes, “por eso va a llegar gente de Ushuaia a La Quiaca para reunirse en el corazón de la República Argentina, en Córdoba” y anunció que “quedan muy pocas entradas, porque cuando arrancó la venta volaron y todo lo que son las más baratas y las más caras están agotadas, pero quedan muy buenas ubicaciones en platea para ver a este histórico Beatle”.
Consultado sobre la génesis de este vínculo del prócer del rock con la ciudad de Córdoba, Palazzo mencionó que “para la primera vez, su mánager vino varias veces a hacer la avanzada, viajó para recorrer la ciudad y le gustó mucho el (estadio) Mario Alberto Kempes por las características que tiene y por las posibilidades del ingreso de la técnica”. Además, recordó que “nosotros tuvimos la posibilidad de viajar a Estados Unidos invitados por su Cámara de Comercio, junto con otros empresarios cordobeses y autoridades de la ciudad capital” de Córdoba. En ese marco, “se visitó a una compañía internacional que representa a Paul McCartney” y las autoridades presentes se comprometieron “a allanar caminos para que se puedan realizar shows sin necesariamente ser sponsors del evento”. Según sus palabras, la idea era “facilitar las cosas, ayudando a que todos los procesos para que un artista internacional llegue a una ciudad, que involucran sí o sí a las fuerzas vivas como a los bomberos, a la policía y al trabajo mancomunado de lo público y lo privado, por más que la inversión y el negocio sea privado”. La propuesta “les pareció muy bien a los empresarios norteamericanos y cuando hicieron el ruteo, pusieron a Córdoba como la última sede de Latinoamérica, después agregaron Perú”.
Como cierre, Palazo apuntó que para el recital del 23 de octubre “el estadio está habilitado para 45.000 personas, incluyendo personas sentadas, porque las plateas preferenciales son numeradas frente al escenario”. Después, “tenés campo de pie que está agotado, platea trasera que está agotada y dos plateas altas, que una de ellas está agotada”, concluyó.