En el último tiempo, y como parte del contexto que atraviesa a organizaciones del sector, varias empresas del mercado energético se vieron afectadas por hechos delictivos, vinculados al robo de material eléctrico.

En días pasados, la subestación Argentina de Salto Grande registró un intento de robo de materiales que fue anulado por el sector de seguridad del complejo hidroeléctrico, evitando pérdidas materiales como humanas, a la vez que logró evitar cualquier situación que pusiera en jaque la seguridad del sistema.

A raíz de este y otros acontecimientos acaecidos en el último mes, es que tras evaluaciones técnicas se definió la incorporación de nuevas tecnologías en materia de seguridad, que complementan y amplían las ya instaladas a lo largo y ancho de la central y las subestaciones.
Más tecnología para brindar mayor seguridad
La inversión a realizar se trata de tecnología preventiva y disuasiva con el fin de evitar intrusiones y robos dentro del predio. Próximamente se instalarán alarmas y nuevo equipamiento en la subestación con avisos a la seguridad del complejo en paralelo con la policía local.

En tanto, se ha reforzado el personal de seguridad nocturna y ampliación de las frecuencias del rondín por los sectores claves. Además, se aumentará la iluminación de algunas áreas.

Cabe destacar que las situaciones de robo a empresas y organismos del mercado energético argentino, se han convertido en una práctica constante, afectando a diferentes actores tales como Transener o distribuidoras de energía como EPE en la vecina provincia de Santa Fe, Edenor o Edesur, que presentan servicio en Ciudad y Provincia de Buenos Aires.

Desde Salto Grande la prioridad es llevar seguridad y tranquilidad a los vecinos de la región en cuanto al cuidado de las instalaciones del complejo como así también en lo referido al proceso de producción y distribución de energía.