La Iapbp (de acuerdo a sus siglas en inglés) reparte cada año distinciones a quienes se ocupan en el rubro de ese nicho en particular, dedicando horas de su vida profesional a retratar la llegada al mundo de miles de niños y niñas.
"Tomados de la mano" o "Holding hands". Así se llamó la imagen de la entrerriana que obtuvo el premio, anunciado en el marco de una exposición realizada en Melbourne, Australia. La foto captura el instante exacto en que un recién nacido, aún sin haber salido del todo a la luz, toma la mano del médico que estaba a cargo de una cesárea.
Fue la primera mención en la categoría Delivery y ganó en General -el máximo galardón-, lo cual significó un reconocimiento a un arduo trabajo, que la lleva a Nora desde hace cuatro años a transitar cientos de horas de su vida en salas de parto, viviendo codo a codo el cúmulo de sensaciones que se conjugan ante la llegada de un nuevo integrante a una familia.
"Fue a fines de 2023, el 18 de diciembre, un día por la mañana. Lo recuerdo perfectamente, porque cuando pude capturar ese instante me di cuenta de que esa imagen era muy valiosa. Hasta ahí no tenía ninguna foto memorable para enviar al concurso, pero cuando saqué esa tuve el presentimiento de que era distinta, diferente. Es por eso que fue una de las dos seleccionadas para enviar al certamen", explicó Dalmasso.
La presunción no fue equivocada, los jueces le dieron la valoración más alta, una distinción, el máximo premio y ahora llegarán impresas y encuadradas a su casa, junto con una medalla que certificará haber sido la ganadora.
En la participación del premio de la Iapbp hay fotógrafos de 55 países que pugnan por ser quienes se lleven el primer lugar a la hora de fotografiar un nacimiento. Nora, pionera en capturar a niños y niñas llegando al mundo, se llevó este año el oro.
"Es difícil, porque no hay límites de imágenes por cada uno, porque la exigencia es alta y porque, por lo general, siempre se premiaron caras. Acá no fue el caso, se le dio una valoración diferente a esa foto que supe desde un primer momento que era especial", sostuvo.
El premio obtenido por la fotógrafa de Paraná tuvo su reconocimiento también a nivel local. La Asociación de Fotógrafos Profesionales de Entre Ríos (Afper) destacó el logro y subrayó que su obra es "excepcional". "Ha dejado su huella en el mundo de la fotografía con una imagen que captura la esencia misma del milagro de la vida. Como miembro de la Asociación Internacional de Fotógrafos Profesionales de Nacimientos, Nora ha demostrado su habilidad excepcional al registrar momentos únicos e irrepetibles para las mamás y sus familias durante el proceso de dar a luz", se precisó.
En esa línea, recordaron que en el Concurso Anual de Fotografía de Nacimientos del 2020, organizado por la Iapbp, ya había obtenido una mención honorífica en la categoría "Delivery". Su fotografía titulada "El Milagro de la Vida" capturó en aquel momento un instante asombroso. "La imagen es conmovedora y poderosa, y refleja la belleza cruda y real del nacimiento", resaltaron desde la Asociación.
Retratar nacimientos: cómo empezó todo
Nora no tiene problema en decir que en la actualidad su oficio de tiempo completo nació casi de casualidad. "Mis dos embarazos los transité con mucha felicidad, fueron momentos muy plenos para mí y la verdad que amo ser mamá. Cuando mi hija mayor fue a cumplir 15 años, el fotógrafo de su fiesta me pidió fotos desde el embarazo. Ahí me di cuenta de que tenía cientos de imágenes, pero ninguna de su parto. Eso me frustró, pero a la vez me dio la idea de que era un buen nicho desde el cual intervenir desde lo profesional. En 2017 me recibí de fotógrafa, me asesoré con una colega española y desde 2019 me dedico exclusivamente a esto. Fui la primera en el país en establecer la foto de parto como un segmento particular en la profesión, la primera en inscribirme en la Asociación y, naturalmente, la primera en ganar un premio. Para mí es una satisfacción muy grande, porque realmente disfruto mucho de lo que hago", detalló. A Nora, fotografiar nacimientos la motiva. No sólo es un ingreso económico, sino que además es un motor, una pasión y una responsabilidad. "La primera vez que lo hice fue casi como un experimento. Y me sentí muy bien. De ahí en más decidí que era por ahí. Por eso mismo obtuvé los permisos necesarios y hoy puedo ingresar a las salas de partos y quirófanos de dos establecimientos de salud donde me desempeño con comodidad. Mi objetivo es capturar la esencia de ese día, de manera discreta, respetuosa y de la forma más auténtica, como tributo a la mayor historia de amor y fortaleza, estando lo más invisible posible", comentó
La cámara de la entrerriana ya tiene más de 700 partos a cuestas y promete tener muchos más. "No dejé de trabajar ni una semana desde 2019 en adelante, ni siquiera en pandemia. De hecho en aquel momento era como una especie de nexo entre quienes nacían, sus padres y sus familias, porque por cuestiones obvias no podían estar cerca. Siempre tengo trabajo por suerte Ahora, gracias a las redes, ya pasé de promocionarme a que directamente me llamen. Cono quienes me contratan tengo un encuentro previo, charlamos, nos conocemos y les muestro cómo trabajo", subrayó.
Las fotos de Nora tienen un común denominador, el respeto por el momento que para muchos es único en su vida. Se trata de una regla establecida por ella, a diferencia de otros que prefieren trabajar los partos desde una posición más "cruda" o explícita.
"No lo critico, son formas. Pero no es la mía. Yo trato de que la imagen sea siempre cuidada, desde la primera hasta la última. Es un momento especial y por eso, desde ese lugar, capturo a mi manera lo que está pasando", concluyó.