En diálogo con Diario Río Uruguay, la doceentes Silvia Rosana Cáceres, directora de la Esc. N° 22 “Yapeyú” (en San Jaime de la Frontera), explicó que se trata de una institución “muy antigua, que tiene 133 años y cuenta con un sector del edificio muy viejo, que es el que necesita las reparaciones”.

Al respecto, manifestó que “las gestiones -de su renovación- se vienen realizando desde hace mucho tiempo, ya que yo estoy hace tres años y, anteriormente, otros directivos también gestionaron el arreglo interior del sector izquierdo de la escuela”, dado que “hace un par de años empezó a colapsar y se comenzaron a ver rajaduras y grietas que cada vez se fueron profundizando más”.

Según las palabras de la directora, en el 2022 “se gestionó el arreglo de la institución”, en el que “se incluía también la instalación eléctrica de la escuela, porque también es antigua y como nos veíamos en la necesidad de instalar aires acondicionados por el clima”, debía ser controlado el estado de todo el lugar, por lo que “en el 2023 vinieron de Arquitectura de la provincia e hicieron algunas reparaciones menores, que durante el 2024 estuvieron funcionando bien”.

No obstante, la directora comentó que “este año, la zona de San Jaime atraviesa una gran sequía, que provocó que volvieran las rajaduras en las paredes”, motivo por el que “se volvió a hacer un pedido a la departamental de escuelas, mandamos fotos, videos y solicitamos que se acercaran para que conocieran nuestra realidad”, por lo que “intervinieron y desde la CAFESG vinieron a hacer un recorrido en febrero, donde determinaron que incluirían a nuestra escuela dentro de las instituciones prioritarias para arreglos”.

Aun así, mencionó que con la lluvia de este jueves “empezamos a ver cómo el agua caía por las paredes como nunca” y subrayo que “es la primera vez que llueve de esa manera dentro de la escuela”, por lo que consideró que fue “debido a las rajaduras que se hicieron durante este verano”.

Como consecuencia, remarcó que “las aulas que se quedaron mojadas están sin luz por el riesgo de electrocución”, teniendo en cuenta que “durante la lluvia se encontraban electrificadas, porque el agua corría sobre las tomas de luz”.
Por el momento, durante la jornada de este viernes, la directora aseguró que “no le dimos electricidad al sector porque estamos esperando que los electricistas controlen la situación”, pero “mientras tanto, reubicamos a los nenes en otros lugares” para continuar con el dictado de clases.

Cabe destacar que, actualmente, la escuela -más antigua de San Jaime- cuenta con una matrícula de 280 alumnos y funciona como la institución cabecera de la zona, ubicada en el centro de la localidad.

Finalmente, la directora de la escuela N° 22 comentó que, a raíz de los sucesos de este jueves, desde la departamental “nos manifestaron que se estaban tramitando aulas móviles para traerlas y que los alumnos empiecen a dar clases allí hasta que se pueda iniciar la obra y refaccionar todo ese sector”.