Todo quedó en evidencia cuando los guardias visualizaron, mediante las cámaras de seguridad, a dos mujeres que estaban del lado de afuera del muro perimetral en actitud claramente sospechosa. En ese momento, por las cámaras se observa que una de ellas se agacha y se dan a la fuga inmediatamente.
Cuando los guardias concurren hasta el sitio, constataron la presencia de un bulto conteniendo marihuana fraccionada, la cual había sido introducido por un caño de un desagüe, el cuál luego era tironeado desde el interior de la propia cárcel.
Cuando el personal del servicio penitenciario revisa el lugar, pero desde el lado interno, encontraron un envase tipo tetrabrik conteniendo jugo mezclado con alcohol, 2 paquetes de cigarrillos y otro envoltorio conteniendo 51 envoltorios de nylon color negro con
marihuana.
Por último, se señaló que todo fue informado al fiscal en turno, quien dispuso el secuestro de los efectos y el depósito de la sustancia en dependencias de la División Tóxico de la Jefatura Departamental.