Luego de las declaraciones formuladas en medios nacionales por parte de la hermana Martha Pelloni, la madre de la menor víctima del denominado “Caso Alfonzo” salió a tomar distancia de las imputaciones que hizo la religiosa.

En diálogo con Diario Río Uruguay, Cristina Escobar detalló que la semana pasada concurrió al Congreso de Lucha contra la Trata que se realizó en la sede de la UNER “porque me pareció interesante, sobre todo por lo que me tocó vivir a mí” y fue allí donde -personas que la identificaron- la invitaron a que contara ante el auditorio la terrible experiencia que lo tocó padecer, “pero ahora veo que están tergiversando todo lo que dije. Fui con ganas de aprender más, pero ahora me doy cuenta que había personas con otras intenciones”, dijo indignada.

Vale traer a colación que, en declaraciones a medios nacionales, la hermana Marta Pelloni atribuyó a Cristina Escobar graves imputaciones a funcionarios políticos locales.

Consultada sobre las expresiones de la fundadora de la Red Infancia Robada, dijo estar al tanto que “que la hermana Pelloni ha hecho declaraciones en el programa de Jorge Lanata, pero no voy a entrar en polémica con ella. Es Marta Pellloni la que debe hacerse cargo de lo que dijo y explicar que es lo que está diciendo o no”.

Cristina subrayó que “yo solo me limito a contar lo que mi hija me contó a mí después que la rescatamos del departamento Alfonzo. Pero es el juez el que va investigar eso, que deberá decir quien es culpable y quien no” y si alguno de los mencionados “estaba verdaderamente o no donde era llevada mi hija”. Concluyendo en que “quieren usar mis declaraciones y hacerme responsable de decir que tal o cual persona ya es culpable en la causa”.

En ese marco, Cristina coincide con lo manifestado recientemente por su abogado querellante Daniel Cedro, “acá lo importante es que el hombre que tenía a mi hija ahora está preso y va a ir a juicio”.

Finalmente adelantó que ha decidido “no hablar más hasta el momento del juicio, porque que cada vez que lo hago utilizan mis palabras con otros fines”, asegurando que en este caso “lo importante no es lo que pusieron como importante, lo importante era que se abrió finalmente un foro para atender tantas necesidades de niñas abusadas y sus madres”. Cayendo en la conclusión que “al final, cada vez que hablo nunca se habla de mi hija que es la víctima de todo esto, nadie me pregunta cómo está mi hija, ella pasa desapercibida porque solo quieren utilizar mis declaraciones para llevar agua a su molino”.