En ese marco, se efectivizó una comisión policial de Jefatura Departamental de Policías de San Salvador, en la localidad de Lanús, con la anuencia del Juzgado de Garantías de la ciudad de Concordia; a fin de proceder con el traslado de dicha persona desde la ciudad de Buenos Aires hacia esta ciudad de San Salvador, en calidad de detenido a disposición del fiscal interviniente en la causa penal.
Los hechos
El jefe de Policía de San Salvador, Christian Medrano comentó oportunamente que “fuimos sorprendidos a última hora de la noche y a la madrugada del miércoles 18 de mayo por la gran cantidad de personas que se comunicaban con nosotros al 101, a los cuales acudimos, porque fue una seguidilla de llamados”.Indicó que recibieron doce llamados y todos tenían la misma situación, “llamaban a los números fijos de la vivienda, todas personas de edad, adultos mayores. Estamos chequeando si además de la guía telefónica, ellos trabajan con padrones electorales donde sale el número de documento de la persona. No son al azar. No es gente de acá. Los eligen por la edad”, afirmó Medrano a Mercurio Noticias.
En ese marco, comentó que “les decían que tenían un familiar retenido o secuestrado, en distintas localidades, le estamos apuntando con un arma, se escuchaban gritos de fondo, era toda una producción artística de los delincuentes. Las voces que se escuchaban eran de hombres y mujeres”, detalló.
Luego, el jefe policial remarcó que “tuvimos una madrugada terrible. Nos reunimos con todo el personal de guardia, sacamos todos los móviles a la calle, funcionarios que estaban de guardia ofrecieron sus vehículos particulares para cubrir la ciudad. Una veintena de policías para cubrir toda la madrugada corroborando a las familias, conectando con las personas afectadas, y asegurando que estén bien”.
Una víctima
Lamentablemente, en el ardid cayó una vecina de la localidad de San Salvador, con quien se vuelven a comunicar y le dicen que estaban llegando a la ciudad. Le indican que iban a llamar a un celular y no al fijo y que saliera a dar vueltas en bicicleta; ellos le iban a indicar un lugar donde dejar la plata. En este caso, le dijeron que le habían secuestrado a la hija y que la estaban golpeando. La mujer no se pudo comunicar con su familiar porque estaba trabajando en el censo que oportunamente se realizaba en la ciudad de Paraná.
La persona que cayó en la trampa no se comunicó con la Jefatura de Policía y dio aviso recién a las 10 de la mañana, cuando el delito se concretó a las 8.
En esa oportunidad, el jefe de Policía confirmó le lograron sustraer un monto de 3.800 dólares, que depositó en un lugar y que vio el momento en el cual lo recogieron.
