Allí, personal policial debió concurrir por una situación de violencia de género.
Golpeada
Al llegar los uniformados, se encontraron con una mujer muy nerviosa y llorando, quién manifestó que su pareja la había agredido físicamente, propinándole cachetadas en el rostro y lesiones en las manos.Cuando quisieron hablar con el denunciado, éste arrojó al patio un sable antiguo - de aproximadamente un metro de largo - intentando luego darse a la fuga.
Finalmente, fue reducido y - por disposición del fiscal José Arias - el hombre de 30 años, quedó detenido por “lesiones y amenazas, en contexto de violencia de género”.