El puesto de control policial se había montado frente al ingreso al complejo termal Vertiente de la Concordia y cerca de las 18 hs. de este martes se detuvo a una utilitaria Mercedez Benz Sprinter -dominio CFM 289- la cual estaba convertida a ambulancia, pero que en realidad transportaba en su caja cerrada a personal de la siempre polémica Corporación para el Desarrollo de Salto Grande (CODESAL), organismo provincial responsable de la explotación turística de las playas y termas en la zona del lago.

Gracias a la verificación del sistema integrado de datos, la fuerza provincial se enteró de inmediato que el vehículo tenía pedido de secuestro por parte de la Justicia desde el 27 de diciembre del año 1999, ya que dicho rodado estaba vinculado a una causa de “robo a mano armada”, hecho donde presuntamente se sustrajo dicha utilitaria.

De acuerdo a los datos que pudo obtener Diario Río Uruguay, el pedido para dar con el paradero del vehículo data del año 1999 y la CODESAL lo habría comprado en diciembre de año 2010, sin realizar la verificación ni la transferencia correspondiente. Incluso la tarjeta verde todavía figura a nombre de una firma  denominada UNIFE S.A. de la ciudad de Rosario, provincia de Santa Fe.

Actualmente el vehículo no cuenta con la habilitación para funcionar como servicio de emergencia y mucho menos para el transporte de personal, que es para lo que se lo usa diariamente, según señalaron los conductores del rodado a los funcionarios judiciales.