Minutos después que el sujeto logró ingresar al local, un efectivo policial que presta servicios de sereno en la esquina de Corrientes y Urquiza se percata del hecho tras escuchar un fuerte estruendo provocado por la ruptura del vidrio.
De inmediato solicitó refuerzos y procedió a reducirlo y detenernos. Mientras que el delincuente fue alojado en la dependencia policial y puesto a disposición de la fiscalía en turno.