Por razones que aún se tratan de establecer, el auto pierde la estabilidad despistándose y saliendo de la cinta asfáltica, colisionando contra un árbol. Fue así que el conductor terminó con fracturas de costillas y traumatismos en su columna y cráneo, resultando éstos de carácter graves.
Sobre el joven Nicolás se informaba que había sufrido heridas cortantes y politraumatismos en distintas partes de su cuerpo, resultando esas lesiones de carácter graves, por lo que ambos quedaron internados en el Hospital San Benjamín de Colón.