La Brigada Abigeato de Federación se encontraba realizando controles e inspecciones de negocios comerciales del rubro carnicería cuando el oficial Sub Inspector Fernández a cargo del Móvil JP 1320, junto al Sargento Olivera Carlos, Cabo Gómez José y Cabo Engelman Raúl, se presentan en el local ubicado en las cercanías Avenida Entre Ríos y Los Jazmines. Los efectivos fueron atendidos por el propietario del negocio a quien se le hizo conocer el motivo de la presencia policial lo que causó evidentes molestias, lo que hizo suponer presuntas irregularidades. A pesar del mal humor, el comerciante entregó la documentación que justificaba la procedencia de la carne vacuna, porcina y aviar que tenía para su comercialización.  No obstante ello, cuando fueron a constatar lo exhibido en papeles en una cámara frigorífica, los brigadistas encontraron cortes cárnicos vacunos en estado de descomposición dado a su evidente color verdoso. Además, con el sólo hecho de mover los trozos de carnes se podía sentir un fuerte olor a putrefacción, pudiéndose inclusive divisar una mosca verde muerta sobre uno de los cortes removidos. También se verificó la presencia de achuras vacunas en bolsas de nylon, con líquido en su interior, en un estado peor que los cortes cárnicos.

Con estas evidencias y luego de realizar fotografías para dejar asentadas las graves transgresiones a la Ley de Carne se labró al responsable de la carnicería el acta de infracción, anoticiándolo del decomiso de la carne y achuras bovinas en mal estado. Como justificación el comerciante argumentó que “se los daría a alguna persona para sus perros”.

Al respecto, los efectivos le remarcaron que no tenía en cuenta algo prioritario como es la salud humana y que por la falta de sanidad, existía riesgo cierto de posible consumo ya que la carne en mal estado estaba en un equipo de frío donde almacenaba la carne para vender. Ante el procedimiento, el titular de la carnicería agredió verbalmente a los funcionarios con todo tipo de improperios.

 A pesar de la hostilidad, los brigadistas dieron cumplimiento a la ley procediendo a decomisar 67,100 kgs de carne Vacuna y 53,500 kgs. de Achuras. Luego se dio intervención al Médico Veterinario Ad Honorem Zubieta Julio, quien al examinar los productos cárnicos dictaminó lógicamente que los mismos no se encontraban en condiciones organolépticas para el consumo humano y aconsejó la desnaturalización inmediata mediante incineración.

Cabe señalar que en pleno procedimiento se solicitó la presencia de Bromatología Municipal Federación a los efectos de que tomen conocimiento de las falencias sanitarias encontradas y proceder en consecuencia.